Siempre he dedicado mi tiempo a escribir sobre las cosas positivas en mi vida y sobre todas las personas que me han llevado a ser una abogada de las causas importantes y cercanas a mi corazón. Sin embargo, hay unas personas que son igual de importantes, y me llenan también, aunque de una manera muy distinta, ¡los haters! Ya lo veo venir, estas a punto de decir: “¿porque le das tanta importancia a la gente así?” Pues déjame contarte.
Yo estoy más que clara que siempre han existido esas personas que no están de acuerdo con las cosas que escribo. Están las que me lo dejan saber en los comentarios de algún post o instgram story, y están las que lo hablan a mis espaldas; pero todavía encuentro mi voz para escribir a pesar de las cosas que puedan decir. Hay muchas personas ques están en desacuerdo con mi estilo de vida idealista. Les molesta que pienso que todo tiene solución. Solo porque no me preocupe por lo que pueda pasar, no me quita lo de perfeccionista y “control freak,” pero soy una chica trabajadora y con mil planes y metas y si me ofusco en las cosas negativas, me voy a volver loca.
Me di cuenta recientemente que las personas que se pasan comentando cosas negativas y “hating,” son personas que en su día a día hacen las mismas cosas que yo. A quienes les molesta lo que escribo, igual escriben unos “posts” en Facebook inmensos comiéndose al mundo, como si los problemas sociales se resolvieran con un “like” y un “share”. A quienes les molesta que vaya a eventos de moda, son los primeros en brincar cuando anuncian un sorteo de productos. ¿Entienden lo que les digo? Literalmente tengo una listita de 2 ó 3 personas en mi cuenta de Instagram que no importa lo que ponga, siempre van a tener una opinión negativa. Esos que en alguna encuesta, sobre algo trivial siempre contestan “no,” o los que en el barómetro para medir cuánto les gusta la foto que publiqué, lo marcan en menos de la mitad. Claro, me molesta porque me están dañando las estadísticas por gusto, pero vamos a buscar el lado positivo siempre. ¡Le añaden “views” a mi “story”, y les dan actividad a mis medios sociales!
Claro, no estoy minimizando lo que es la crítica ni el pesimismo en las redes, porque si alguien está más que clara que lo hay, ¡soy yo! La crítica tiene sus límites, y hay una gran distinción entre lo que son los famosos haters y los que son unos abusadores a través de la pantalla. Pero tenemos que aprender a coger las cosas suaves, porque en el momento que nos frustramos por todos los comentarios que nos hacen en las redes, nos convertimos esclavos de esos haters que saben que sus palabras nos afectan. ¿Y de verdad quieres que ellos piensen que tienen tanta importancia en tu vida? Es bueno estar consciente de que existen, aceptar que son importantes en el crecimiento de uno, y recordar que somos lo suficiente maduros para dejarlos pasar porque estamos a otro nivel, al cual ellos aún no han logrado llegar.